Cayó el telón del Primer Festival del Río, celebrado en el marco de los XXIII Juegos Centroamericanos y del Caribe, y fueron 702.000 asistentes, entre público barranquillero, delegaciones deportivas y turistas, quienes le entregaron “medalla de oro” a esta iniciativa liderada por la Alcaldía Distrital de Barranquilla y la organización de los Juegos.
 
Durante 10 días el Gran Malecón del Río, además de permitir una mirada distinta de ciudad, brindó la oportunidad de acercarse al río Magdalena y apreciar el talento de artistas, empresarios, y pequeños emprendedores que deleitaron a los asistentes con una experiencia única.

"Estamos muy orgullosos de todo el trabajo realizado. Los barranquilleros y turistas siguen enamorándose más del río Magdalena y el Gran Malecón. Es muy gratificante ver la gran concurrencia de público al Festival del Río, nos encanta ver a las familias disfrutar de las actividades, jóvenes, niños y abuelos gozando de esta iniciativa que demostró la calidad humana de nuestra gente y su riqueza artística", afirmó el alcalde Alejandro Char.   
 
Los talentos, la diversidad musical y la riqueza dancística hicieron presencia en dos tarimas para que brillaran más de 2.560 artistas, en su gran mayoría de Barranquilla, quienes durante 60 horas de presentaciones mostraron al mundo que en la ciudad se vive con alegría y goce.
 
El evento también significó una importante generación de ingresos para quienes participaron en 70 estands, con un promedio de 5 vendedores cada uno, cerca de 350 empleados de atención, 50 personas en producción y 12 adicionales al personal del Gran Malecón encargado de labores de aseo y seguridad. Una amplia y variada gama de productos cautivó a nuevos compradores y abrieron importantes mercados, cuyos resultados no pueden ser medidos de forma inmediata, pero representaron para ellos una importante fuente de ingresos adicionales y oportunidades de negocio.

El Festival del Río, por las diferentes opciones que ofreció, se convirtió en un evento de familia que rompió barreras sociales y culturales. Niños y adultos mayores, jóvenes, familias enteras recorrieron el escenario y disfrutaron de una importante oferta gastronómica y de servicios.

Las Casas Distritales de Cultura, semillero del más grande talento local, las Universidades del Norte y del Atlántico visibilizaron unos procesos formativos de gran importancia. Fueron ellas las encargadas de aportar el 70% de la nómina artística. El resto corrió por cuenta de artistas nuevos que luchan por ser reconocidos y valorados y que recibieron los aplausos de los asistentes.

El Festival del Río, que terminó con una gran fiesta donde hubo rock, música tropical y vallenato, y la presentación de Sebastián 'Tatán' Mejía y Luis Ortega, tuvo atracciones adicionales como la presencia de destacados grupos de porrismo, que consiste en el uso organizado de música, baile y gimnasia; y capoeira, un arte marcial afro-brasileño que combina facetas de danza, música y acrobacias, así como expresión corporal.

El sentir generalizado de los asistentes fue que eventos como este deben hacer parte de la cotidianidad de la ciudad. “Alex se sobró con esta maravilla. El malecón está  muy bello y con esta cantidad de cosas a uno le provoca quedarse siempre aquí”, expresó Adelina Hurtado, una mujer de 60 años que fue invitada por sus nietos al Festival. “Yo no conocía esto y me encantó”, dijo.

Por su parte Diego Rivera, de Operación Talento, se mostró agradecido con la oportunidad brindada por el Festival para que sus más de 120 jóvenes talentosos pudieran presentarse en un escenario de corte internacional. Igual es el sentir de Javier Aguilar, director de la Fundación Artística y Cultural JA Music que trabaja con muchos que ven en las expresiones artísticas una oportunidad para ser mejores ciudadanos.

Asimismo, los visitantes  se concientizaron del cuidado del medio ambiente con el ‘ecobot’ y su llamativa forma de invitar al reciclaje.

El Gran Malecón del Río ha sido, desde su apertura hace un año, el espacio de mayor atractivo para propios y visitantes, no solo para ir en familia, sino para admirar un nuevo escenario donde ya se han realizado 148 eventos con más de 1.2 millones de visitantes. Esta es una nueva venta de Barranquilla hacia el mundo.